La mascota fue sin dudas protagonista del evento; su historia se volvió viral por una particularidad
una boda en la isla de Holbox en Quintana Roo, México
. Lo llamativo de este acontecimiento es que los encargados de la boda tenían órdenes de solo invitar al perro, dejando a su dueño en el olvido.Este animal de compañía fue toda una sensación en la fiesta, volviéndose el personaje principal y robándole el foco a los novios. Jahir Jimenez, el dueño de Murph, compartió la historia y enfatizó en que él solo fue de acompañante.
Murph es el nombre de esta mascota que se robó muchas sonrisas en el evento, ya que todos los presentes querían estar cerca de él..Mientras el golden era la sensación de la ceremonia, Jahir estaba en un segundo plano, observando y grabando como su mascota se convertía en el alma de fiesta. “Nunca se me va a olvidar el día que invitaron a mi perro a una boda. Sí, leíste bien, lo invitaron a él y a mí no”