La moneda recorta su apreciación en el año de 14.5% a 6.8%, ante la expectativa de que la Fed suba su tasa de interés, entre otros factores; analistas estiman que el tipo de cambio llegaría a 18.60 al cierre del 2023
La depreciación del peso mexicano frente al dólar da un respiro a exportadores, receptores de remesas, empresarios del turismo y hasta a las finanzas públicas.
Esta situación, aunado a factores como la turbulencia que viven los grupos aeroportuarios, llevó al dólar a sumar dos sesiones por arriba de 18 pesos. “Ya no se espera que el tipo de cambio vuelva a bajar a niveles de 16.62 y más bien pudiera seguir cotizando entre 17.70 y 18 pesos por dólar en este mes y, para el final del año, es posible un ajuste para cerrar entre 17.50 y 17.70 por dólar”, siempre y cuando no existan otros sobresaltos, acotó la especialista.
También están los receptores de remesas, quienes, a agosto, sumaron 10 meses consecutivos con una caída en el poder adquisitivo de las divisas que reciben a causa del superpeso. Por último están las finanzas públicas. Según reportes de la Secretaría de Hacienda, la recaudación del IVA se ha visto afectada por el peso fortachón, al igual que la renta petrolera.
“En cuanto a la recaudación del IVA, se registró una disminución de 8.4 por ciento, en términos reales, con respecto a enero-agosto del 2022. Esto se debió a la apreciación del tipo de cambio y al incremento en las compensaciones del impuesto”, añadió.