El apoyo de Alberto Fernández a los ataques de la vicepresidenta contra la Corte Suprema de Justicia de la Nación expone la debilidad política del Presidente.
Alberto Fernández respaldó el nuevo ataque de Cristina Kirchner contra el Poder Judicial. El lunes, la vicepresidenta de la Nación publicó en su canal de YouTube un video de 14 minutos. El martes, el Presidente usó su cuenta de Twitter para reafirmar que, más allá de la eventual crítica que se pueda esgrimir contra las formas de su aliada política, el problema que ella señala existe y habría que debatirlo para encontrarle una solución.
“Nada puede funcionar en un país si carece de un Poder Judicial que tenga legitimidad. Legitimidad que sólo se logra a partir de la credibilidad y el respeto que sobre sus decisiones tenga la ciudadanía”, expresó Cristina Kirchner. ¿En qué se basan para dar por sentada la falta de legitimidad de la Justicia? ¿Qué elementos permitirían señalar que la ciudadanía no cree en la Justicia? Si han de justificarse en los perniciosos vínculos entre la política y la Justicia, pues deberían admitir que ambas partes han colaborado con ese entramado durante años y supieron beneficiarse por ello.
Ahora bien, cuando Cristina Kirchner era presidenta, cada vez que la Justicia no fallaba como ella deseaba, en sus apariciones por cadena nacional peroraba contra los jueces y los medios, asociándolos en una fórmula que deslegitimaba a ambos: constituían el partido mediático judicial.